
No fue ni por gusto ni para un experimento, pero ayer se me quedó el celu en la casa y fue horrible (que pena). De verdad, sentí una angustia y preocupación enorme cuando me percaté del inconveniente. Creía que me iban a llamar de todas partes para cosas importantes y eso que no tenía nada pendiente que confirmar, como una hora al doc o una cita con mi ejecutivo del banco… Sólo era el hecho de estar incomunicada el que me dejó intranquila
Cuando me dí cuenta que se me había olvidado el celular, me sentí en pelota, como cuando salgo de la casa sin aros (aunque suene superficial, es cuático salir de la casa sin aros, no les pasa?), pero peor!!! Y digo que triste, porque me he hecho tan dependiente de éste objeto, que siento que no era necesario hacer tanto alboroto o sentir tanta angustia. Y creo que no soy la única…
Mientras iba avanzando el día, me percaté que no era tan malo estar sin el teléfono… no andaba revisándolo a cada rato (y eso que no me considero tan lunática del celu), no andaba pendiente si tenía mensajes (que maniática), y no estaba chalada con el instagram (mi app favorita EVER).
Lo único en lo que me preocupé fue llamar a mi mami para avisarle que andaba sin celu, y no se preocupaba si me llamaba o wasapeaba y yo no le contestaba…
Al final del día, llegué a la conclusión que no fue tan malo!!! (definitivamente). Al contrario, en algún momento me sentí libre de esta carga de andar como esclavos de la tecnología. Así que las invito hacer este experimento y que vivan uds. mismas esta experiencia de libertad y despreocupación.
Aunque, les confieso que cuando llegué a casa, corrí a buscar el celu y a revisar “todos” mis mensajes, que tampoco eran tantos ni tan importantes… jejejeje 😀
gracias por el experimento pero…ni cagando! jajajajja yo soy una que sin asco reconoce que ama la tecnología y estar conectada. Ya me acostumbre y me gusta. Lo único rebelde tecnológicamente hablando que hice fue cerrar mi facebook personal y solo tengo la página de mi blog y el face de Kellun (la pyme de mio novio) activas.
oye morí con tu gift del monito traumado!!! como lo pones en un post!!!!!!!! :O
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en algún momento tb cerré mi face (antiguo) porque tenía puro weonaje de amigos (gente que con cuea había visto una vez) así que decidí hacerme otro con mis reales amigos y familia
el gift fue un copy/paste noma de san google 😉
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Yo creo que nos hemos hecho demasiado dependientes del celu, como ahora todo lo podemos hacer con un solo aparato nos sentimos desnudos, como dices tú, cuando no lo traemos con nosotros, y lo encuentro terrible!!! Pero así es. Personalmente no soy dependiente, pero sí he visto a gente desesperada jajaja pero lo uso harto para revisar mis mails y el blog 🙂
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si al final es muy práctico y cómodo con todas las aplicaciones que nos ayudan en nuestros diario vivir (tlin! idea de post)
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Qué chistoso. Yo podría vivir sin celu tan bien. Creo que sólo me preocuparía por el hecho de que si me pasa algo, me pierdo o me quedo sin plata cosas así, a quién le pido ayuda? porque no me sé ningún teléfono de memoria y ahí maaaal. Pero no tengo dependencia con el aparatito aquel. Me sirve proque lo tengo, juego y veo twitter o el wasap, pero si no está, no está no más. De hecho, el finde fui a la playa y lo revisé sólo en la noche y a la rápida. 😀
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Bien por ti… hace tiempo que no escuchaba (leía) a una persona que no es dependiente al “aparatito aquel” (me encantoooo) bkn!!! 🙂
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Absolutamente no! Vivo pegada a él y me encanta es como mi segundo marido hahahahaha y eso q no tengo facebook pero vivo de otras app y juegos 😀
Entretenido el post y sincero por lo demás hahah
Cariños
http://axablackford.blogspot.com
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jajajajaa… siiii es muy difícil!!! lamentablemente somos muy dependientes de la tecnología hoy en día…. todos somos unos Nomofóbicos 😦
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Jajajja me suele pasar eso de sentirme en pelota si salgo sin aros, es cuático o salir sin delineador, me siento morirsh! pero sin celu, ya me he habituado a no tener ese apego… lo dejo cuando salgo con mi familia, y trato de usarlo lo preciso, porque si no no nos damos cuenta y estamos pegados a la pantalla…
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si, eso es verdad! no nos damos ni cuenta y en vez de compartir estamos pegados en el celu… mal mal mal
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jajaja es cierto!! me pasó en un comienzo con el wasaap menos mal ese fervor duro poco y con suerte en mi celu tengo esa aplicación, bendita memoria interna que me ayuda a no estar pegada a él.
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Yo sentí algo similar cuando se me cayó al baño, fue una angustia terrible. Después de sAcarlo y sEcarlo y saber que no le había ocurrido nada tan grave, me puse a reflexionar sobre lo dependiente que estoy de este aparato y de lo dependiente que está la sociedad en general. Lo que realmente me exaspera de todo esto son esas personas que no despegan la mirada de su celu ni siquiera cuando uno les está hablando… menos mal no he llegado a ese nivel de manía, pero sí me siento un poquito dependiente, y es que es imposible no serlo porque es un aparato muy práctico, siempre y cuando no se llegue a extremos.
Buena entrada, saludos!
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si, que lata, yo tengo una “amiga” que cuando salíamos a tomar un trago, estaba todo el rato pegada en el celu (FOME) y yo siempre le reclamaba… al final decidí no salir más con ella!!! ahora sólo nos wasapiamos…. no queda de otra
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